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Ale aqui el principio de un pequeño juego... ¿alguien se anima a continuar?

(Al iluminarse la escena aparece JUAN sentado en el borde del escenario con el telón bajado. Juega distraído con una cortina de hule que se encuentra a su lado. JUAN levanta la mirada y empieza a hablar dirigiéndose al público)

JUAN: Todo empezó por culpa de una simple cortina de baño. Era parecida a ésta, era del mismo material, con las mismas formas, los mismos colores y... bueno, esta mancha de aquí la otra no la tenía la verdad (JUAN empieza a limpiar el trozo de plástico con la mano) pero eso no importa... Sólo para que se hagan una idea, eran unas cortinas muy similares a ésta. Supongo que todos habéis pensado lo mismo, a que sí... son espantosas. Mi padre una vez me dijo que se podía adivinar absolutamente todo de una persona con sólo ver sus cortinas de baño. ¿Vosotros que pensaríais de alguien con unas similares a éstas? ¿Nada? Yo a la única conclusión que he llegado es que mi padre era imbécil. Lo digo con cariño y con todos mis respetos claro está, pero era un viejo cascarrabias que se casó 5 veces con 5 mujeres distintas. Así que, o bien su teoría no era del todo correcta, o bien ninguna de mis 5 madres había usado nunca una puñetera cortina para el baño. Bueno pero centrémonos... la historia no es sobre mi padre ni tampoco es un tratado sobre la fabricación de cortinas de hule. Ésta es una historia de engaños... y no sólo eso sino también de traiciones, conjuras, venganzas, luchas de espadas por el amor de una mujer y... perdón, me he emocionado y creo que he exagerado un poquitín las cosas. Porque en realidad ésta es una historia que le podría suceder a cualquiera... Sí, sí... a vosotros también, no es ninguna broma... por eso siempre me estoy preguntando ¿por qué coño me ha tenido que pasar a mí? Bueno da igual, ¿qué más da? Lo mejor será empezar por el principio y vosotros mismos ya juzgareis. Así que me presento, me llamo Juan, un placer. Esto de aquí... (levantando la cortina) esto son mis cortinas del baño y ésta... (señalando hacia el escenario) ésta es mi historia. (Se dirige hacia el interior del escenario dando la espalda al público, cuando está a punto de pasar a través del telón se para) Ah sí, perdón, y como os había dicho al principio: todo empezó por culpa de una simple cortina de baño. (JUAN desaparece por detrás del telón).

¿Continuará?